Aunque el mundo de la moda sea un sector enfocado a las mujeres y para las mujeres, la triste realidad es que sigue siendo un sector dominado por los hombres.
En España, tenemos el gran privilegio de que el 62,4% de las empresas textiles tengan como titular a una mujer, en el resto del mundo estas cifras ni se acercan. Este puede ser un buen motivo para enorgullecernos de nuestro país, y no solo por el futbol.
El 70% del trabajo que hay dentro de la industria textil es llevado a cabo por mujeres, pero solo un 14% es en los altos cargos. El resto ejercen de trabajadoras rasas, sin mucha voz. Y esto en lo que a la industria textil se refiere. Es decir, en la fabricación pura y dura de la ropa.
Pero si nos vamos un poquito más allá y nos enfocamos en el diseño de esas prendas, los datos comienzan a ser más alarmantes. Las grandes casas de moda están dirigidas por tíos. En el año 2017, de las 313 marcas que lideraban el mercado, solamente el 40% tenían una mujer como directora creativa.
Y teniendo en cuenta el dato de que el 90% de las personas que trabajan en una 'maison' como modistas, costureras o planchadoras son mujeres pues la conclusión del análisis de estos datos es bastante crítica: machismo.
Y según se va subiendo el nivel de lujo de lo que analices, el machismo también se incrementa. Si te vas a las grandes capitales de la moda como Milán, París o Nueva York se hace más evidente. Ninguna de las tres capitales alcanza el 40% en los datos de paridad en lo que puestos de directivos y jefes se refiere.
En las escuelas sucede lo mismo. El 80% de las estudiantes de diseño de moda son chicas pero a la hora de presentarse como jóvenes diseñadores, presentan muchísimos más proyectos los chicos.
Y aunque sí que es cierto que hemos evolucionado muchísimo, dentro del mundo de la moda, sigue habiendo ese estigma de que las mujeres son las que hacen el trabajo sucio y los hombres son los que diseñan y firman las etiquetas.
Nombres como Giorgio Armani, Christian Dior o Gianni Versace sobresalen siempre al mencionar a los diseñadores más conocidos a nivel mundial. Opacando a mujeres con mucho talento pero que han sido silenciadas al tener menos oportunidades.
Es el momento de darse cuenta que allá donde vayamos hay machismo y que, aunque poco a poco vamos deshaciéndonos de ello, es tarea de todos vencerlo.