En el nombre de la niña, Perfumerías Avenida sigue en Euroliga

Tiene 18 años y se ha erigido en la líder de Perfumerías Avenida. La que se la juega, la que arenga, la que va al rebote, la que mete la fe en la pista en el momento clave. No jugó sola, la defensa que no bajó los brazos del bloque y la aportación de Carter, Fasoula o Gil en los momentos clave sumó muchos enteros, pero Iyana Martín bien puede poner su nombre en la placa que sitúa a Avenida en la siguiente ronda de la Euroliga. 

Hay que reconocer que ver Würzburg como estaba en los minutos antes de comenzar el duelo y ya en su inicio provoca un cosquilleo y hace sentir que es imposible que nada salga mal en el objetivo que se plantee Perfumerías Avenida. Si además el encuentro comienza con dos triples consecutivos en los dos primeros lanzamientos y eso se acompaña con una buena actitud defensiva y un lenguaje no verbal en pista y banquillo que deja muy claro lo metido que está el equipo, aumenta el optimismo. Así comenzó el duelo ante el DVTK en el que se dirimía el futuro europeo del equipo salmantino, a vida o muerte como conjunto de Euroliga. 

De salida un 11-3 en los primeros cinco minutos en los que se vio una versión del equipo muy similar a la de los mejores instantes ante Estudiantes. El uno -el balón- para todas ha sentado bien y esa vocación por compartir llevaba al 13-3 con el que el equipo visitante pedía tiempo muerto. Mejoró el ataque de DVTK o encontró caminos tras la primera rotación de Avenida y buscando más situaciones interiores para Tadic o Gulbe aunque mandaba el equipo local al acabar el primer cuarto, 15-10. 

Ya avisaba en la previa la entrenadora que no era partido para pensar en un paseo porque también para el rival era una cuestión definitiva y apretón húngaro coincidió con varios tiros exteriores que no encontraron aro y un par de pérdidas con lo que el marcador se apretó. Una buena recuperación de Fasoula que asistió a Vilaró y un 2+1 de la griega en una acción marca de la casa permitían volver a coger espacio, 20-14. 

Endurecía el partido el equipo centroeuropeo y le costaba adaptarse a eso a Avenida que sumaba varios ataques infructuosos y atrás tenía algún problema al rebote lo que otorgaba a DVTK segundas opciones y la posibilidad de recortar e incluso ponerse por delante en el marcador, 22-24.

La defensa en primera línea de Kayansi y Miklos rozaba lo ilegal pero se permitía así había que igualar esa intensidad y que aparecieran las 'valientes' y bajo ese adjetivo -aunque atesora otros muchos-, se puede destacar el de la más joven de la clase: Iyana Martín. La asturiana acumula créditos en cada prueba a la que se enfrenta y la prueba fue el final de cuarto con lucha denodada en acciones al rebote y una canasta final sobre la bocina en la que acabó cayendo de boca sobre el parqué sin la que la dolieran prendas. Al descanso 28-24 y con la grada gritando 'mvp'.

Problemas en los primeros ataques para sumar aunque se mantenía el tono atrás y llegaba un primer triple de Carter para alimentar el marcador que veía avanzar los segundos sin apenas moverse. 

Agua en el desierto otra canasta de Carter más un triple de Koné que ponía el 40-32. Aunque eran gotas dentro de la falta de fluidez general atrás se intentaba dejar el resto en cada acción y eso permitía mantener una ventaja que en el tramo final de cuarto se vio reducida porque otra vez el ataque se bloqueó con pérdidas consecutivas de Domínguez y Guirantes -fuera de onda ofensiva de nuevo-, y llegaron los aciertos desde el tiro libre del equipo húngaro., 40-39. 

Cinco minutos tardó en reanudarse el choque porque el trío arbitral no decidía quién debía sacar de banda lo que acabó en técnica al entrenador húngaro que Guirantes no aprovechó desde el tiro libre. Así empezaba el cuarto definitivo aunque después del 2+1 de Fasoula sí llegaba la canasta de la puertorriqueña a la que respondía Kanyasi y Charles.

Regresaban a la pista Gil, Martín y Carter que sobre la bocina anotaba un triple importantísimo porque restaba mucho pero se necesitaban puntos y mantenerse, aunque fuera por poco, por encima. A arreones pero otra vez cuatro puntos seguidos encontrando buenas movimientos de balón para acabar dando con Fasoula y Gil ponían un 52-46 aun a 4'30" del final. 

Los dos equipos se llevaban al límite en las posesiones y Carter levantaba al pabellón con un canasta tras robo para que después Martín lo pusiera definitivamente de pie con un 2+1. Avenida se iba diez arriba aunque aun había que sufrir en un larguísimo final en el que se respiró pensando en nuevas citas con los mejores de Europa. En el nombre de la afición, del equipo y de una niña.