El rebote ofensivo concede a Super Agropal las opciones para derrotar al Zamora

Probablemente en el deporte de equipo una de las mayores virtudes es la de contar con alternativas en el juego, y esa fue la ventaja que le permitió al Super Agropal Palencia vencer a un Caja Rural Zamora que superó a los palentinos en diferentes facetas del juego.

No en vano, el equipo visitante mostró una buena efectividad en el lanzamiento, aunque se fue diluyendo a medida que avanzaba el partido, pero también una buena capacidad defensiva para frenar las capacidades ofensivas locales.

No contaba, sin embargo, con el espíritu de lucha de un Súper 'motivado' Agropal, espoleado por sus 5.000 incondicionales, que le llevó a combatir cada pelota, de forma que cada rebote ofensivo ofrecía una nueva opción de anotar.

Lejos de lo que después sería el partido, el primer cuarto fue un constante ataque de ambos equipos, que parecían haber centrado todos sus esfuerzos en sus capacidades ofensivas.

Tras el 24-27 del primer parcial, el Súper Agropal Palencia comenzó a notar la falta de efectividad en los lanzamientos, con sólo 5 puntos en los primeros 5 minutos, lo que permitió al Caja Rural Zamora alcanzar su máxima ventaja, 29-40. Reaccionaron los de Luis Guil buscando mejores opciones de lanzamiento e intensificando la defensa, para llegar al descanso con 42-46.

Al inicio del tercer cuarto, los palentinos culminaron la remontada y mediado el parcial colocaron un 54-50 que parecía dirigir al equipo hacia la victoria, pero el gigante lituano Paukste asumió las riendas del Caja Rural Zamora para mantener sus opciones en el partido.

La dinámica se mantuvo en el último cuarto, en el que un aguerrido pero inteligente Krutwig llevaba al Súper Agropal a diferencias de 7 puntos. Estaba claro, sin embargo, que el partido se decidiría en las últimas acciones y, como no podía ser de otra forma, un rebote ofensivo de Vaulet acabó con las esperanzas zamoranas.